A raíz de la lectura del artículo "Ni internet ni las clases por TV son suficientes: cómo el cierre de colegios agrava las desigualdades educativas" me ha venido a la cabeza , de una forma ya muy insistente , todas las ideas , vivencias , deseos , reproches mentales ,.... que desde que se cerraron los centros educativos a consecuencia de la pandemia han estado contínuamente persiguiéndome.
En el curso 2005/2006 iniciamos en mi centro el programa TIC. Era el primer año que teníamos en las aulas de nuestro centro una equipación tecnológica suficiente que permitía hacer algunas cosas como la que voy a relatar.
Uno de mis alumnos tuvo una lesión en una pierna , creo que en el tobillo, que le obligo a estar ausente del centro , e incluso del pueblo, durante un mes. Gracias a la Plataforma Helvia de nuestro centro, a que yo llevaba varios años con mis alumnxs usando nuevas tecnologías y a que aquel curso decidí hacer una "inmersión" tercnológica , aquel alumno, al menos en las áreas que yo le impartía no perdió ningún contacto.
Dos años después , en el curso 2007/2008, con mi centro ya inmerso , aunque de forma desigual, en el "Proyecto TIC", el CEP de Úbeda me pidió que colaborase con él dando asesoramiento a diferentes centros (cinco creo recordar) de nuestra zona que estaban poniendo en marcha un "Proyecto TIC".
Además ese curso se creó en el CEP de Úbeda un Grupo de Trabajo que englobaba a los distintos Coordinadores TIC de la zona , a quienes estábamos colaborando con el CEP asesorando a los centros en materia de nuevas tecnología y a varixs asesores de Primaria.
Yo defendía ya en aquel momento que todo el profesorado de nuestros centros debía tener doble formación : técnica, en cuanto al manejo de las diferentes herramientas digitales y pedagógica para saber aplicar las nuevas tecnologías al desarrollo normal del trabajo en el aula.
Teníamos los medios , teníamos al alumnado..... pero no teníamos al profesorado.
Por aquel entonces convencer a mis compañerxs , a mi Jefe de Estudios y a mi Director de la necesidad de formarnos como profesorado resultó infructuoso. Recuerdo perfectamente las palabras de los dos primeros : "Tú ves la botella medio vacía, debes verla medio llena. Valora lo que hay y verás como poco a poco la gente llegará al nivel que tú quieres que alcance".
Continué.
En el curso 2010/2011 , teniendo a alumnado en quinto curso de Primaria , que ya llevaba varios años conmigo, estuve una semana de baja, sin poder moverme de casa por una lumbalgia. Diariamente, en el tiempo de clase, mis alumnxs hacían cuanto yo les proponía e instantáneamente recibía sus trabajos a través de las diferentes herramientas de que disponía Helvia .... y de otras de las que se disponía en la red. Mis alumnxs tenían blogs y compartíamos documentos a través de "dropbox".
Para que más alumnxs de mi centro pudieran beneficiarse de las bondades de ser un centro TIC y de disponer, por ejemplo, de ordenadores portátiles para cada alumno.... se llegó a la conclusión de que yo podía ir a algunas clases para "hacer algo".
Pero la forma de trabajar en mi aula llegó a oídos de Lola Molina Jaén , profesora por aquel entonces en la Escuela de Magisterio de SAFA. Y nos organizamos de tal manera para que en momentos determinados pudiese haber en mi aula alumnxs de Primaria , alumnxs de Magisterio , Maestro de Primaria y Profesora de la Escuela de Magisterio, trabajando juntos, compartiendo experiencias y viendo que era posible trabajar de un modo diferente usando puntos de vista muy actuales , con nuevas tecnología y constatando que lo más importante era el contacto humano. ¡Fue increíble ver cómo aparecían preguntas y respuestas por personas de edad y formación tan distinta que eran respondidas indistintamente! ¡Cómo se formaban equipos para la realización de proyectos pensados y diseñados por todos!
Varios años después, lo que en un principio se pensó para algunos centros , se generalizó para todos los centros de Primaria, al menos para el Tercer Ciclo.
Supuestamente ya se contaba con todo : buenos equipos , alumnado que ya llegaba con preparación y profesorado que se había formado. Además , ¡teníamos garantizado que el acceso del alumnado a Secundaria era el adecuado en preparación para que el Profesorado de esa Etapa no tuviese nada más que "caminar"!
¡Pues no!
Salvo excepciones, que las hubo muchas y muy interesantes , el profesorado de Primaria no hizo uso técnico y pedagógico de las nuevas tecnologías y el de Secundaría, con sus excepciones también, creyó que el alumnado ya tenía suficiente preparación técnica y que le importó muy poco la preparación pedagógica.
¡Y ahora todo se nos ha venido encima!
¡Si hubieran hecho caso a lo que hace más de diez años algunos preconizábamos ahora todo sería diferente!
¡Y pensar que, como dice el artículo enlazado, el 97% del alumnado podría hacer uso ahora en casa de las nuevas tecnologías!
¡¡ Esta , me parece , que va a ser una de las pocas cosas que no puedo perdonar !!
Pues llevas mucha razón, pero la brecha social y digital la tiene el alumnado y sus familias, pues cuando éstos tienen tecnologías en las casas el profesorado se pone las pilas sí o sí, como yo estoy viendo hacer a compañeras y compañeros que no sabían enviar un email. Gracias por tus refkexiones
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