Esta mañana he oído en la radio que de tantas cosas que nos ha traído el coronavirus nadie debe olvidar que nos ha proporcionado tiempo para pensar.
Más tiempo y a más personas. Ahora aquellas personas que por la rutina diaria no se paraban a pensar y que algunos pensaban que es que no tenían capacidad para hacerlo están empezando a sacar conclusiones que posiblemente no sean del agrado de los sectores "que mandan".
Hoy es lunes , treinta de marzo. El próximo cinco de abril, domingo, es el domingo de ramos. Estamos en plena cuaresma y a un paso del comienzo de la semana santa. Hace unas tres semanas se oían opiniones de autoridades civiles y relacionadas con la iglesia que aseguraban que la última palabra en la celebración de los ritos correspondientes a la próxima semana dependían de ellas. Ahora está claro que no se celebrará la semana santa en ningún lugar de la Tierra.
Los hechos tan graves que están sucediendo a nivel mundial hacen que resulte una obviedad que el interés por las vidas de las personas está por encima de creencias religiosas y que las autoridades esclesiásticas no tienen más remedio que replegarse ante las autoridades estatales, pero en todos los lugares del mundo (Hay excepciones que más que otra cosa parecen "chaladuras" : https://www.eldiario.es/internacional/iglesias-brasilenas-continuan-abiertas-coronavirus_0_1010349890.html ).
También queda corroborado en extremo el viejo dicho que dice que "no es lo mismo predicar que dar trigo". Todos los creyentes , de la religión que sea, se están dando cuenta , una vez más , que a la hora de la verdad no existen milagros. Y que el "castigo divino" (de existir) llega a propios y extraños y además parece como si todos los dioses (el nuestro, el auténtico, y los de los otros) se hubiesen puesto de acuerdo para no arreglar nada y repartir males a diestro y siniestro. "Nuestros dios" , como dirían algunos , no nos está librando de la maldición del coronavirus.
La credibilidad de los ministros de los dioses queda en entredicho y su autoridad mermada.
Queda también demostrado que los ritos religiosos (en este caso las procesiones) son esencialmente celebraciones festivas , folclóricas , de ocio.
Y como no podemos pasar sin estas manifestaciones festivas hay algunas cadenas de televisión ( al menos TeleÚbeda y La Loma que yo haya visto) que están supliendo y suplirán más aún en los próximos días estas ausencias con reposiciones de años anteriores.
Otras cadenas de televisión , las dedicadas a deportes, por lo poco que yo he visto, están contínuamente reponiendo encuentros deportivos. De repente todo cuanto gira alrededor de los espectáculos deportivos ha desaparecido.Queda claro que cada vez que se ha hablado de deporte en los medios de comunicación se refería al espectáculo. Es cierto que se habla de la imposibilidad de practicar deporte y que están buscándose soluciones para que la gente realice actividad física en casa , pero lo importante era el espectáculo. Me llamó ayer la atención ver que se ha montado una especie de campeonato virtual de fútbol en el que participan afamados jugadores, una especie de videojuego.
Pero, ¿cuántos médicos ,enfermeros , medicinas , mascarillas , respiradores,.. podrían financiarse con el sueldo de un futbolista de élite?.
Como no paran de decir los medios ahora los héroes son los médicos , los cuidadores de las residencias , los transportistas,..... ¿será así cuando acabe esto? ¿O volverán a ser los héroes de nuestros hijos y nietos esos nombres famosos que ahora están desaparecidos y que en algunos casos se niegan a colaboran rebajándose sustancialmente el sueldo?.
Es conveniente que no olvidemos las conclusiones que poco a poco vamos sacando.
Hoy es lunes , treinta de marzo. El próximo cinco de abril, domingo, es el domingo de ramos. Estamos en plena cuaresma y a un paso del comienzo de la semana santa. Hace unas tres semanas se oían opiniones de autoridades civiles y relacionadas con la iglesia que aseguraban que la última palabra en la celebración de los ritos correspondientes a la próxima semana dependían de ellas. Ahora está claro que no se celebrará la semana santa en ningún lugar de la Tierra.
Los hechos tan graves que están sucediendo a nivel mundial hacen que resulte una obviedad que el interés por las vidas de las personas está por encima de creencias religiosas y que las autoridades esclesiásticas no tienen más remedio que replegarse ante las autoridades estatales, pero en todos los lugares del mundo (Hay excepciones que más que otra cosa parecen "chaladuras" : https://www.eldiario.es/internacional/iglesias-brasilenas-continuan-abiertas-coronavirus_0_1010349890.html ).
También queda corroborado en extremo el viejo dicho que dice que "no es lo mismo predicar que dar trigo". Todos los creyentes , de la religión que sea, se están dando cuenta , una vez más , que a la hora de la verdad no existen milagros. Y que el "castigo divino" (de existir) llega a propios y extraños y además parece como si todos los dioses (el nuestro, el auténtico, y los de los otros) se hubiesen puesto de acuerdo para no arreglar nada y repartir males a diestro y siniestro. "Nuestros dios" , como dirían algunos , no nos está librando de la maldición del coronavirus.
La credibilidad de los ministros de los dioses queda en entredicho y su autoridad mermada.
Queda también demostrado que los ritos religiosos (en este caso las procesiones) son esencialmente celebraciones festivas , folclóricas , de ocio.
Y como no podemos pasar sin estas manifestaciones festivas hay algunas cadenas de televisión ( al menos TeleÚbeda y La Loma que yo haya visto) que están supliendo y suplirán más aún en los próximos días estas ausencias con reposiciones de años anteriores.
Otras cadenas de televisión , las dedicadas a deportes, por lo poco que yo he visto, están contínuamente reponiendo encuentros deportivos. De repente todo cuanto gira alrededor de los espectáculos deportivos ha desaparecido.Queda claro que cada vez que se ha hablado de deporte en los medios de comunicación se refería al espectáculo. Es cierto que se habla de la imposibilidad de practicar deporte y que están buscándose soluciones para que la gente realice actividad física en casa , pero lo importante era el espectáculo. Me llamó ayer la atención ver que se ha montado una especie de campeonato virtual de fútbol en el que participan afamados jugadores, una especie de videojuego.
Pero, ¿cuántos médicos ,enfermeros , medicinas , mascarillas , respiradores,.. podrían financiarse con el sueldo de un futbolista de élite?.
Como no paran de decir los medios ahora los héroes son los médicos , los cuidadores de las residencias , los transportistas,..... ¿será así cuando acabe esto? ¿O volverán a ser los héroes de nuestros hijos y nietos esos nombres famosos que ahora están desaparecidos y que en algunos casos se niegan a colaboran rebajándose sustancialmente el sueldo?.
Es conveniente que no olvidemos las conclusiones que poco a poco vamos sacando.